Hoy ha sido tu despedida,
con todo el dolor de mi alma,
eras por todos querida
ya has encontrado la calma.
Noto tu ausencia física
pero te llevo en el corazón
teníamos una especial química,
siempre luchaste con tesón.
Siempre te recordaré,
eras mi mejor amiga
y como tú lucharé
por mis amigos y mi familia.
Me diste una lección de vida
con tu entereza y valentía
espero cerrar la herida
de tu ausencia, amiga mía.
Sólo me queda el consuelo
de que siempre estarás presente,
una vez superado el duelo,
en mi corazón y en mi mente.
Además tengo la creencia
de una vida en el más allá,
sólo es cuestión de paciencia,
nos volveremos a encontrar.
Sé que desde donde estás
cuidarás de tu familia y amigos
no dejarás de luchar
y nosotros contigo.
Agustín Luque
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